Jordi Sabater Pi, un hombre bueno y un gran científico - Redacción

ADDAREVISTA 39

El 5 de agosto de 2009 fallecía a la edad de 87 años el primatólogo catalán Jordi Sabater Pi. Su vida transcurrió, desde que encontró al gorila albino Copito de Nieve (Floquet de Neu) que languideció durante años en el Zoo de Barcelona, ligada, bien a pesar suyo, a este animal por el que sentía una verdadera antipatía y que compró a unos indígenas en al excolonia española de Guinea, de la tribu fang de la que después documentaría sus costumbres.

Sabater Pi, con quien el ADDA se fue relacionando a través de los años, fue un enamorado de África en donde pasó gran parte de su vida. Excelente dibujante -esta fue su primera gran vocación- ha dejado, como naturalista, un importante legado científico en el estudio de ciertas especies de aves y batracios y en demostrar que los grandes primates tienen cultura, como lo demuestra la utilización de instrumentos.

Fue catedrático de psicobiología de la Universidad de Barcelona y honoris causa por la Autónoma de Madrid. Donó su archivo personal con innumerables dibujos, fotos, y objetos etnográficos a la Universidad de Barcelona. Trabajó con la National Geografic Society junto a Diane Fossey estudiando los grandes gorilas de montaña.

Sabater Pi, un hombre bueno y afable con la chispa socarrona que sólo la edad le permite expresar; fue, además, un gran científico que ni en Cataluña ni España se supo reconocer cuando era la ocasión. Sus últimos años se sucedieron en un lamentable olvido. Cataluña le negó, a la vez que el merecido reconocimiento en vida, un digno retiro a pesar de estar en una delicada situación económica agravada por problemas de dependencia en su más próximo, y querido, entorno familiar; y España le negó el Príncipe de Asturias para el que estaba nominado y que se concedió a Jane Goodall.

Eso sí, a su muerte, como un repentino y tardío despertar, los medios de comunicación catalanes y personalidades presentes en el óbito, han resaltado la importancia de su figura y de sus investigaciones; cayendo los medios, una vez más, en el tópico de ligarlo a su forzado alter ego: el gorila albino. Vale, pues, en toda su expresión, que "nadie es profeta en su tierra".

 

Ong ADDA  -Diciembre 2009


Relación de contenidos por tema: Necrológicas


Temas

Haz clic para seleccionar