En el número anterior de esta publicación, próximo a su cierre, se tuvo la oportunidad de dedicar un artícu­lo a la aparición de la gripe porcina declarada por primera vez en Méjico. Ya se exponía, entonces, la gravedad de esta aparición que la Organización Mundial de la salud. OMS, tipificó como pandemia de grado 6 para pasarla al grado 7, que es su máxima cota.

En España se apresuraron, dada la presión del sector cárnico y la importancia que en Cataluña y Aragón ha adquirido el porcino pues son millones los cerdos que malviven encerrados, a que no se hablase más de la llamada gripe porcina, para pasar a denominarla Nueva Gripe o, más tarde, Gripe A; cuando en Estados Unidos, que tienen que ver mucho en esto, se la continúa llamando gripe porcina (swineñu). Como si todo fuese tan fácil de resolver a base de nomenclatura. Pero no se habla, ni palabra, de las causas verdaderas o posibles pero sintomáticas, del porqué del origen de esta nueva epidemia, y a pesar de la continua atención mediática que se le dedica por los sucesos que van acaeciendo, se abre un gran silencio hacia la ciu­dadanía que debe permanecer lerda de conocer opiniones, informes, investigaciones y todo cuanto se relacione con los orígenes de este nuevo mal.

Una información serena, sin sensacionalismos ni alarmismos, no debe ser silenciada a fin de poder formar opinión con conocimiento de causa que ayudará a superar el problema. La prestigiosa asociación Huma­ne Society United States, HSUS, ha emitido un deta­llado informe del que aquí se hace eco en un numeroso contenido.

ANTECEDENTES

En mayo de 2009, en Estados Unidos se confirmaba que las condiciones de hacinamiento en las grandes granjas industriales de cría intensiva de cerdos y el transporte de los animales vivos en largas distancias crean una base fértil para el desarrollo de nuevos virus y la amenaza de la aparición de la gripe porcina. Un análisis preliminar del virus H1H1 aislado de enfer­mos humanos en California y Texas ha revelado que seis de los ocho segmentos de los genes virales surgieron de las cepas porcinas norteamericanas conocidas desde el año 1998 cuando una nueva cepa fue identificada en una granja intensiva de Carolina del Norte.
La llamada "virgen de hierro" inmoviliza al animal para facilitar la lactancia de los lechones.
Avalaba lo anterior la Columbia University's Center for Computation Biology, el Insthute for Advanced Study de la famosa Universidad de Princeton, la University of Edinburgh, la St. Jude's Children's Researchs Hospital y Rubén Donis, virólogo molecular del U. S. Centres for Disease, Control and Prevention. Y el afamado Dr. Robert Webster conocido como "el padrino de la investigación de la gripe" director de la U. S. Collaborating Center de la Organización Mundial de la salud, OMS, ha manifestado que "la cepa de triple variable en los cerdos, descubierta en le año 1998 en EUA parece ser la precursora". Quizás por todo lo anterior, allí se la continúa llamando Gripe Porcina.

TRASPASANDO LAS BARRERAS

Según el informe de la HSUS, la "Gripe Española" desatada en el año 1918, mató entre 50 y 100 millo­nes de personas; las cifras, a pesar de la gran mortan­dad, no son exactas pues al intentar ocultar la epidemia, no se llevó una estadística ajustada. Jamás nin­guna otra enfermedad, guerra o hambruna llegó a matar tanta gente en tan poco tiempo. Se le llamó "la española" porque durante la primera guerra mundial al silenciar la epidemia, tan sólo España, país neutral, publicó y extendió la noticia. Fue desencadenada por un virus de la gripe aviar N1H1 que saltó la barrera de las especies animales: desde las aves hasta los humanos y estos pasaron el virus a los cerdos, siendo, desde entonces, una de las enfermedades respiratorias más comunes en los cerdos. Una tos "perruna" se extendió -se está hablando del año 1998- por las granjas de Carolina del Norte y allí se descubrió un virus híbrido humano-porcino que había captado tres genes de la gripe humana o estacional y que, poco después, adquirió dos genes de la gripe aviar, convir­tiéndose en un virus de variedad triple nunca antes descrito.

DESARROLLO ACTUAL DEL VIRUS

¿Qué es lo que ha llevado aquel virus progenitor a desencadenar la actual pandemia humana y a su rápido crecimiento y diseminación? Ciertos científicos postulan que la gripe humana podría haber empezado a circular el año 1995 por las granjas intensivas de Carolina del Norte, el lugar de mayor "producción" -el animal máquina- de todos los Estados Unidos con una densidad más del doble que cualquier otra megacría intensiva. Su población porcina llegó en el año 1998 a la cifra record de 10 millones de cerdos (ahora son 65 millones), superando en dos millones la cifra de 6 años atrás, a la vez que el número de granjas porcinas... ¡iba disminuyendo; De 15.000 granjas en el año 1986 se pasó a 3.000 en el año 2000. La explicación es clara: hacinando 25 veces más animales en cada "zona productiva". Si en Carolina del Norte en la década de los 90, el 85% de las granjas -mejor dicho, centros de producción- tenían menos de 100 cerdos, 10 años más tarde éstas, con más de 1.000 cerdos, copaban el 99% de toda la producción estatal.
La ruta principal de trasmisión de la gripe porcina se considera la misma que la gripe humana estacional. O sea, a través de pequeñas gotas de secreciones nasa­les infectadas; no es por casualidad que los expertos atribuyan a la sobrepoblación y el hacinamiento como las principales causas de los nuevos virus mutantes de la gripe. Pero no es tan sólo esto; la inmovilidad a que se somete a las cerdas en la llamada "virgen de hierro", un instrumento de tortura que las somete postra­das para facilitar la lactancia de los lechones obtenidos por inseminación artificial y los innumerables fárma­cos que se les suministra para evitar enfermedades, hacen, junto al continuo estrés, que se las defensas naturales del animal se debiliten haciéndolo cada vez más susceptible a la trasmisión de enfermedades.

HACINAMIENTO Y LARGOS TRANSPORTES

Como repetidamente se ha expresado en esta publica­ción la cría intensiva apareció en la década de los 50 del siglo anterior, casi como siempre, en Estados Uni­dos. Fue con las aves y los pollos de engorde llamados broilers. Este nefasto sistema que tanto sufrimiento ha causado a miles de millones de animales y que está desde entonces en continua evolución desatendiendo por completo el bienestar de los animales, llevó muy pronto a la aplicación del procedimiento a los cerdos. Se dijo "hacinar a los cerdos es rentable, si se hace debidamente" Q?) pasando, al menos, a 5.000 cerdos por granja. Un patólogo de la Universidad de Minessota ya expresó en la renombrada revista Science "si un virus aparece en una granja de 5.000 animales ten­drá mayores oportunidades de replicarse y potencialmente diseminarse que en un grupo de 100 animales de una de aquellas granjas pequeñas". Elemental. También el Dr. Webster en el año 1998 manifestaba "la cría intensiva de cerdos y aves en naves adyacentes y con el mismo personal permite el resurgimiento del virus", pues también Carolina del Norte es uno de los principales productores del sector aviar, matando casi 750 millones de pollos y obteniendo 3.000 millo­nes de huevos de las gallinas en batería. La aparición del virus de 1989 y su rápida expansión se culpó al transporte de los animales vivos en largas distancias; algo insistentemente denunciado por los animalistas.

UNA FÓRMULA PARA EL DESASTRE

Los dos segmentos genéticos del virus H1N1 de la gripe porcina que se está extendiendo a los humanos de forma imparable y con rapidez por todo el mundo se correlaciona de cerca con la densidad de población porcina según determinó un investigador financiado por la Unión Europea y como tal, en Europa, la misma revista Science la describió como "una formula para el desastre". Téngase en cuenta que tan sólo en Cataluña hace ya varios años, la cabana porcina se estimaba alrededor de los 6 millones de cerdos. Algunos investigadores especulaban que la próxima epidemia podría surgir desde Europa. La misma Dirección General de Agricultura de la U.E. advertía en contra de "la concentración de la producción que está dando pié a un aumento de riesgo de epidemia"; y Dinamarca país cuya economía se sustenta principalmente en el cerdo y los huevos (eggs and bacon), así como otros países, europeos han impuesto topes al número de cerdos por granja y al total que se pueden criar en cada país.
Entretanto, Cataluña y parte del noreste español ha visto como millones de cerdos se transportan por carretera en un alienante viaje de ida y vuelta por Europa; son traídos para ser engordados en pestilentes granjas/cobertizos y devolverlos para su matanza des­pués de contaminar nuestras aguas freáticas con sus purines debido a la composición de los piensos, algo repetidamente denunciado por esta publicación. El sector del porcino desde hace 2 años está a la baja y lo que se les presentó a unos agricultores, inexpertos en ganadería, como una "economía productiva", los ha impulsado hacia una espiral de pérdidas. Mercolleida (Cataluña) marca los precios para todo España y la exportación; si, según se expresan, "el kilo de cerdo vivo tiene un coste entre 1,02 y 1,07/Kg. pocas veces se subasta a más de 1,19 /Kg. Flaco beneficio.

CASO OMISO A LAS ADVERTENCIAS

En el año 2003 la American Association of Public Health que es la más antigua entidad de profesionales de la salud pública en el mundo, pidió una moratoria en las actividades de las granjas de cría intensiva y en el año 2005 las Naciones Unidas apremiaron a "los gobiernos, autoridades locales y agencias internacionales en cuanto a la necesidad de asumir un papel mayor en la lucha en contra de las granjas de cría intensiva" lo cual, expresaron, en combinación con los mercados de animales vivos, proporciona las condiciones ideales para que el virus (de la gripe) se expanda y mute hacia una forma más peligrosa". De momento, en el mes de agosto de 2009, ya se comunicó que la gripe porcina humana había infectado una granja de pavos en Chile con el gran peligrodel e una nueva mutación, que afortunadamente no se ha sabi­do de su transmisión a los humanos. Chile, que ahora ya ha dejado el invierno austral, ha sufrido un elevado número de víctimas humanas.

LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD, OMS.

Creada en el año 1948, dependiendo de las Naciones Unidas y con sede en Suiza, tiene por cometido velar por la salud de la humanidad. Su papel en éste su pri­mer gran reto, ha sido contemplativo -declarar el grado de pandemia- más que ejecutivo, pues rápidamente se ha visto superada por los acontecimientos. A sus primeros intentos de contener la enfermedad en Méjico y el control de viajeros en algunos países al igual que se hizo con la gripe aviar, no ha existido ninguna barrera para el virus N1H1 que viajando a sus anchas en cualquier medio, ahora aprovechando la rapidez de las comunicaciones, ha tomado posesión de la casi totalidad del planeta; "este virus viaja a una velocidad nunca vista, increíble, inédita y sin precedentes" declaraba Margaret Chan, directora de la OMS. Se está al inicio de lo que la historia, más tarde, podrá reportar de cual habrá sido el balance final. Que puede ser final o principio de otra serie sucesiva de nuevas patologías mutantes.
Es posible, si esta pandemia sirve de aviso a los responsables de quienes depende el devenir de los acontecimientos, para que, con calma y serenamente como se decía al principio, analizar las causas que cada vez parecen estar más claras y reconducir una espiral de violencia y abuso hacia los animales que en busca de una "productividad" sin límites esconde un indiscutible afán de lucro, pretende justificar la producción de alimentos para una población de este globo terráqueo -que siempre es y será el mismo- cada vez más deterio­rado por el hombre cuya sobrepoblación ya no encaja con las posibilidades geológicas del planeta. Ésta sí que sería una importante labor -limitación racional de la población futura- de la Organización Mundial de la Salud, siempre que las políticas y los intereses de las grandes, medianas y pequeñas potencias o estados, entren en un razonado consenso. Algo que, muy lamentablemente, por ahora suena como una utopía.